Propagaci�n vegetativa por enraizamiento de estacas o esquejes y acodos

La propagaci�n vegetativa o asexual por medio de enraizamiento de estaca de tallo es la forma m�s com�n de clonaci�n de cultivos flor�colas, arbustos ornamentales, �rboles frutales y especies forestales.

Las estaca y esqueje son unidades reproductoras que se obtienen separando de la planta madre un segmento que contenga zonas meristem�ticas (nudos y entrenudos) Pueden obtenerse de tallos, de hojas o ra�ces, que colocadas en condiciones favorables son capaces de formar un nuevo individuo con caracteres iguales a la planta madre.

A B C

(A); Esquejes de planta herb�cea, (B); estaca y esquejes de tallo, (C); esquejes le�osos

Es un m�todo sencillo que permite obtener plantas homog�neas y de buena calidad comercial. El proceso inicia con la cosecha de las estacas, las cuales se plantan en un sustrato adecuado, otorg�ndoles condiciones ambientales �ptimas para que regeneren nuevas ra�ces adventicias con el objeto de producir una nueva planta. La eficiencia depende de la especie a propagar y es afectada por diversos factores, que pueden ser previos o posteriores a la cosecha de las estacas.

Principales factores que se deben considerar durante el enraizamiento de estacas o esquejes:

Condiciones de las planta madre

Las estacas deben cosecharse de plantas vigorosas, libres de plagas, sin enfermedades de origen f�ngico, viral o bacteriano. Es importante que no presenten s�ntomas de deficiencia de nutrientes (clorosis). Tanto el exceso como la falta de fertilizaci�n son perjudiciales para el enraizamiento de las estacas. Al momento de la cosecha de las estacas, las plantas no deben manifestar s�ntomas de deficiencia de agua.

Se recomienda realizar la cosecha durante la ma�ana temprano cuando el material vegetal esta turgente. Para la mayor�a de las especies, es importante que las plantas no se encuentren en estado reproductivo. La presencia de yemas florales y/o flores puede perjudicar el enraizamiento de las estacas.

Tipo de estacas

De acuerdo con la �poca del a�o y la especie que se trate, var�an los tipos de estacas y la eficiencia de enraizamiento. La estacas pueden ser:

� Herb�ceas, en especies herb�ceas durante todo el a�o.

� De madera suave o herb�cea, a partir de brotes nuevos de primavera en arbustos

� Especies le�osas, y de madera semile�osa, en arbustos durante el verano a partir de tallos del crecimiento de la temporada.

� De madera dura o le�osa, en arbustos y especies le�osas en oto�o o invierno a partir de tallos le�osos del crecimiento de la temporada anterior.

Para obtener mayor eficiencia en la obtenci�n de estacas enraizadas y sea mayor la calidad final de las plantas es importante que los lotes de estacas a enraizar sean homog�neos. Las estacas deben ser de una misma especie y variedad, provenir de plantas madre cultivadas en las mismas condiciones ambientales y que se encuentren en estados fisiol�gicos similares. No se deben mezclar estacas cosechadas en diferentes posiciones dentro de una rama.

Desde su cosecha, el transporte, su plantaci�n en el sustrato de enraizamiento y colocaci�n en las instalaciones de ambiente controlado es importante evitar la p�rdida del agua y el aumento de la temperatura; principalmente en algunas especies de hoja compuesta peque�as o propensa a la oxidaci�n.

En caso de cosechar las estacas durante el mediod�a o a la tarde con elevadas temperaturas, es conveniente bajar la temperatura de estas inmediatamente sumergi�ndolas en agua fr�a y luego aislarlas del medio externo envolvi�ndolas en papel humedecido. Para el transporte de grandes distancias es conveniente el uso de una conservadora port�til. En caso de tener que almacenar las estacas es necesario hacerlo dentro de bolsas de pl�stico cerradas y en c�maras de frio o heladeras de 3 a 10�C. Dependiendo de la especie que se trate, se pueden conservar durante 1 o varios d�as sin que afecte la eficiencia de enraizamiento.

Condiciones ambientales provistas para el enraizamiento:

Caracter�sticas de las instalaciones

� Para evitar la transpiraci�n de las estacas y evitar la deshidrataci�n de estas debe de contar con una alta humedad relativa

� La temperatura adecuada, especialmente en la zona basal de las mismas donde surgen las ra�ces adventicias idealmente debe estar entre 15 a 25�C.

� se debe contar con suficiente luminosidad para permitir que las estacas fotosinteticen y produzcan energ�a.

La instalaci�n de un sistema de enraizamiento que cumple con las caracter�sticas mencionadas puede ser un t�nel de polietileno a nivel del piso o sobre un mesa. La humedad dentro del t�nel se mantiene cerrado en forma herm�tica y regando el sustrato con las estacas en forma peri�dica. Para evitar el aumento de temperatura dentro del t�nel se recurre al uso de un sombreado de polietileno.

Cuando se requiere enraizar estacas durante el invierno, se calefacciona el piso o la mesa con un sistema de tuber�as con agua caliente para garantizar una temperatura m�nima en el sustrato donde van plantadas las estacas.

Figura t�nel de polipropileno para el enraizamiento de estacas.

Los sustratos de enraizamiento deben cumplir las siguientes caracter�sticas:

� Ser suficientemente densos y firmes para servir de anclaje a las estacas.

� Tener suficiente capacidad de retenci�n h�drica.

� Ser lo suficientemente porosos para eliminar el exceso de agua y permitir el intercambio gaseoso.

� Deben ser sanitariamente limpios, no poseer semillas de malezas ni ser fuente de plagas ni de pat�genos.

� El aporte de nutrientes no es tan importante.

En general se utilizan combinaciones de turba y perlita, por sus cualidades de retenci�n h�drica y porosidad respectivamente.

Las proporciones de estas var�an en funci�n de la especie a propagar y de las instalaciones del enraizamiento.

Otros componentes que se utilizan como sustratos son vermiculita y resaca.

El tiempo que tarda un esqueje en enraizar depende de la especie en cuesti�n, del tipo de esqueje, de la edad del tallo, de la forma en que se prepar� y de las condiciones de humedad y temperatura. En general los esquejes foliares enra�zan en unas tres semanas, mientras que los le�osos y semile�osos pueden tardar hasta cinco meses.

Para el enraizamiento se utilizan fitorreguladores del crecimiento, hormonas vegetales naturales o sint�ticas. El tratamiento de las estacas con estas hormonas no solo aumenta el porcentaje de enraizamiento, sino que acelera la iniciaci�n de las ra�ces adventicias, aumenta el n�mero y la calidad de las ra�ces producidas por estaca y aumenta la uniformidad del enraizamiento.

La f�rmula del Endora�z-Ekei de Agroatra est� dise�ada especialmente para facilitar el proceso de enraizamiento con una formula innovadora de f�cil aplicaci�n que permite la asimilaci�n de los fitorreguladores de forma controlada haciendo el proceso m�s eficiente.

Para el enraizamiento de estacas dif�ciles, especies le�osas que necesitan mayor tiempo de enraizamiento es recomendable regar el sustrato mensualmente con el producto de Agroatra Endora�z el cual contiene la mezcla de auxinas, �cidos h�micos y amino�cidos que aceleran el proceso de enraizamiento. Diluci�n recomendada; utilice 20 ml por cada litro de agua.

Aclimataci�n de estacas previo al trasplante.

Dado que las estacas enraizadas provienen de un ambiente con poca demanda de traspiraci�n, sus estructuras para regular la transpiraci�n (estomas) no est�n activas y sus ra�ces no han tenido la necesidad de transportar agua a un flujo constante. Por lo tanto, no tienen la capacidad de frenar la p�rdida de agua ante un ambiente m�s seco y bajo una insolaci�n mayor. Para evitar un alto porcentaje de mortandad de las estacas enraizadas en el momento del transporte o trasplante. Una vez que las estacas est�n enraizadas, se debe realizar la aclimataci�n de las mismas.

La aclimataci�n consiste en trasladar en forma gradual las estacas enraizadas (sin sacarlas del sustrato de enraizamiento) del ambiente de enraizamiento a ambientes con mayor exigencia (mayor demanda de traspiraci�n). Para ello las estacas enraizadas se retiran de las instalaciones de enraizamiento y se ubican en un ambiente con luminosidad y temperatura semejante, pero que est�n al resguardo de las corrientes de aire que producen el desecamiento. Se requiere prestar mucha atenci�n durante los primeros d�as debido a la mayor demanda de riego. Esto es muy importante en el caso de las estacas herb�ceas.

Es importante iniciar con la fertilizaci�n en esta etapa. Esta se puede realizar a trav�s del agua de riego con dosis no mayores a la mitad de lo que se recomienda para la especie en cuesti�n.

Enraizamiento de acodos

El enraizamiento de un acodo se diferencia del enraizamiento de estacas y esquejes en que en el acodo la parte a enraizar no se separa de la planta madre hasta que desarrolla sus propias ra�ces y mientras tanto se sigue nutriendo a trav�s de los haces vasculares de la planta madre. Esta t�cnica tiene dos variantes acodo terrestre y acodo a�reo.

A B

Tipos de acodos: (A) Acodo de tipo a�reo, (B) acodo de tipo terrestre

Durante el acodado la formaci�n de la ra�z es estimulada por auxinas y la acumulaci�n de fotosintatos en los meristemos cercanos al anillado, lo que favorece el desarrollo de ra�ces adventicias en esa zona cuando la rama est� todav�a unida a la planta madre.

T�cnica de obtenci�n de un acodo a�reo

Se realiza un corte de aproximadamente 1-3 cm de ancho en forma de anillo por debajo de 1 cm del nudo de crecimiento; dejando expuesto el tejido del xilema. Se debe escoger ramas de una planta madre saludable.
Aplicar el enraizador Endora�z-Ekei en la zona anillada.
Preparare el sustrato de su preferencia, puede ser una mezcla de turba y fibra de coco humedecida con una soluci�n de Endora�z (10 ml en un litro de agua), si utiliza tierra asegurarse que tenga la estructura adecuada para favorecer el enraizamiento.
Una vez preparado el sustrato se coloca en un pl�stico negro y se cubre la zona en que se realiza el anillado, sujet�ndolo con una cuerda, dejando de 5 a 10 cm por debajo y por de arriba del corte.
Regar cada semana inyectando una soluci�n de Endora�z (10 ml en un litro de agua) durante el tiempo que sea necesario; hasta la aparici�n de ra�ces, de 3 a 6 meses dependiendo de la especie.
Revisar los acodos una vez al mes.
Una vez enraizados se cortan de la plana madre por debajo de la zona de las ra�ces producidas y se trasplanta a una maceta; con mucho cuidado de no romper el capell�n de sustrato y ra�ces. Es recomendable sumergir el capell�n en agua durante 30 minutos antes de realizar el trasplante.
Etiquetar el acodo con la fecha de realizaci�n

Etapas para la generaci�n de acodo a�reo

Procedimiento de acodo terrestre

� Se toma una rama de la planta madre deseada (planta herb�cea).

� Hacer peque�as heridas cerca de los meristemos (nudo) dejando expuesto el xilema

� Aplicar el enraizador Endora�z-Ekei en la zona expuesta.

� Doblar la rama oblig�ndola a tocar suelo.

� Cubrir con tierra y realizar riego seg�n los requerimientos de la planta, utilizando una soluci�n de Endora�z (10 ml en un litro de agua).

� Revisar el enraizamiento despu�s de un mes cada semana hasta obtener suficientes formaci�n de ra�ces.

� Separa de la planta madre y realizar el trasplante a lugar deseado.

La formaci�n de ra�ces en los acodos depende de la provisi�n continua de humedad, buena aireaci�n y temperaturas moderadas en la zona de enraizamiento. La ventaja principal del acodado es el �xito con que las plantas se enra�zan por este m�todo. Muchos clones que no enra�zan f�cilmente por estaca pueden enraizar por acodo, permitiendo establecer la planta sobre sus propias ra�ces.

Los m�todos de acodado son relativamente f�ciles de realizar. Sin embargo, el trasplante es m�s dif�cil cuando el tama�o del acodo es mayor por lo que necesita considerar condiciones especiales para tener �xito en el establecimiento de plantas grandes.

Referencias

Helia Reyna Osuna Fern�ndez, A�da Marisa Osuna Fern�ndez, Andr�s Fierro �lvarez. 2017. Manual de propagaci�n de plantas superiores. Primera edici�n digital. UNIVERSIDAD AUT�NOMA METROPOLITANA-XOCHIMILCO.

Sisaro Damian. 2016. Propagaci�n vegetativa por medio de estacas de tal. Hurlingham, Buenos Aires. Ediciones INTA.

Hartmann, H. T.; Kester, D, Davies, F. T. Jr.; Geneve, R. L. (2002) Plant propagation: Principles and practices. Seventh Edition, Prentice Hall, Inc. New Jersey. 880